El Hotel-Restaurante La Fábrica de Solfa empieza el año presentando una nueva exposición. En esta ocasión decorarán los espacios del Hotel-Restaurante durante los próximos tres meses las esculturas de José Azul (José Ángel López Martín). Nacido en Teruel y afincado en Burbáguena, pueblo de la comarca del Jiloca.
Azul, tras formarse en la fragua de Poleñino (Huesca) trabaja el hierro, recuperando herramientas antiguas y otros materiales que para otros son inservibles y el los convierte en criaturas imaginarias.
José Azul no tenía raíces en la forja. De niño cogía las grandes tijeras de albardero de su padre, en Burbáguena, y las blandía por el aire como si fuera un pájaro de fauces amenazadoras. Desde muy pronto se dio cuenta que montones de herramientas del campo estaban basadas en diseños del mundo animal, y siempre ha dicho que en las herramientas hay un animal escondido…es cuestión de sacarlo.
Tras una etapa con un negocio hostelero en Zaragoza, tuvo la oportunidad de conocer un taller de forja artístico en Poleñino (Huesca). Allí fue acercándose a los materiales y técnicas, dominando el oficio de soldar y limar el hierro, manejar el soplete y la radial. Es una obra regenerativa de hierro y forja.
OBRA:
Es en Burbáguena, donde tiene su taller de forja conocido como «El Tallerico», pero también saca sus esculturas a la calle y a las plazas, llenando de imaginación y realismo nuestros espacios públicos.
Numerosas son las obras del artista que pueden contemplarse en diferentes lugares de la geografía aragonesa: Burbáguena, Calamocha, Báguena, Sádaba (Zaragoza), dos peces y una araña, fabricada con una tostadora de almendras gigante en Utebo, una tortuga en Albero Bajo, una flor en Poleñino y otra en Gallocanta, una obra sumergida en el pantano de Lechago; fuera de Aragón, encontramos obra suya en Bilbao.
Ha expuesto en numerosas ciudades y pueblos de Aragón, País Vasco, Cataluña,… y participado en varias de las ediciones del Certamen de Artes Plásticas José Lapayese, que organiza el Centro de Estudios del Jiloca. En el año 2013 esta entidad, como organizadora de la Fiesta del Chopo Cabecero, encargó a José Azul la escultura-premio «Amigo del Chopo Cabecero».
Desde 2012 posee un taller de forja portátil con el que realiza talleres, demostraciones y exhibiciones en numerosas localidades del Jiloca y alrededores.